Agencia Estatal Boletín Oficial del Estado

1)

proporcionar una educación infantil de calidad es beneficioso para todos los niños y especialmente pertinente para los que proceden de entornos desfavorecidos, como los inmigrantes y los gitanos. Aumenta el bienestar físico y el desarrollo social y emocional, así como las capacidades lingüísticas y las capacidades cognitivas básicas. Su impartición debe ser de alta calidad, asequible, dotada de personal suficiente y accesible para las familias procedentes de entornos desfavorecidos;

2)

aumentar la oferta educativa proporcionando oportunidades de enseñanza y formación más allá de la edad de enseñanza obligatoria puede influir en el comportamiento de los jóvenes y de sus familias, y dar lugar a unos índices más altos de finalización de estudios de segundo ciclo de enseñanza secundaria;

3)

promover políticas activas contra la segregación y dar más apoyo a los centros de enseñanza en zonas desfavorecidas o con un gran número de alumnos procedentes de entornos socioeconómicos desfavorecidos ayuda a dichos centros a mejorar su composición social y su oferta educativa, Con ello mejoran los logros educativos de los alumnos procedentes de entornos desfavorecidos y se reduce el riesgo de que abandonen prematuramente los estudios;

4)

destacar el valor de la diversidad lingüística y apoyar a los niños que tienen una lengua materna distinta a aumentar su dominio de la lengua de enseñanza y, en su caso, en la lengua materna, así como apoyar a los profesores para que enseñen a niños que tienen distintos niveles de competencia lingüística, puede mejorar los logros educativos de los hijos de origen inmigrante y reduce el riesgo de que éstos abandonen prematuramente los estudios;

5)

reforzar la participación de los padres, impulsando su cooperación con el centro escolar y creando asociaciones entre los centros escolares y los padres, puede aumentar la motivación de aprender entre los alumnos;

6)

aumentar la flexibilidad y la permeabilidad de los itinerarios educativos (p. ej. mediante la modularización de los cursos o alternando la escuela y el trabajo) ayuda especialmente a los alumnos con peores resultados académicos, y puede motivarlos a continuar en la enseñanza y la formación que mejor se adapte a sus necesidades y capacidades. También permite abordar los motivos de abandono escolar prematuro específicos de cada sexo, como la incorporación al mercado laboral a una edad temprana o el embarazo de las adolescentes. Además, la limitación de la repetición de curso y su sustitución por un apoyo flexible individual se ha asociado con la reducción del abandono escolar prematuro;

7)

reforzar unos itinerarios de formación profesional de alta calidad y aumentar su atractivo y su flexibilidad proporciona a los alumnos en riesgo unas alternativas creíbles al abandono escolar prematuro. Una oferta de EFP bien integrada en los sistemas generales de enseñanza y formación permite contar con unos itinerarios alternativos que lleven al segundo ciclo de enseñanza secundaria y a la educación terciaria;

8)

reforzar el vínculo entre los sistemas educativo y de formación y el mundo del trabajo, para poner de relieve las ventajas que tiene llevar a término la educación de cara a la empleabilidad futura. Podría procederse a ello mediante periodos de prácticas o una mayor participación del mundo de la empresa en los centros escolares y de formación.

1)

transformar los centros de enseñanza en comunidades de aprendizaje basadas en una visión común del desarrollo escolar compartida por todas las partes interesadas, aprovechando la experiencia y el conocimiento de todos, y ofrecer un lugar abierto, estimulante y cómodo para el aprendizaje, a fin de animar a los jóvenes a seguir sus estudios o su formación;

2)

elaborar sistemas de alerta precoz para los alumnos que presentan riesgo puede ayudar a adoptar medidas eficaces antes de que se manifiesten los problemas, los alumnos empiecen a alejarse de la escuela, hagan novillos o suspendan los estudios;

3)

aumentar la implicación de los padres y otros intervinientes al margen del centro escolar, como los servicios de la comunidad local, las organizaciones que representan a los inmigrantes o a las minorías, las asociaciones culturales y deportivas, o los empresarios y las organizaciones de la sociedad civil, permiten soluciones holísticas para ayudar a los alumnos en situación de riesgo y facilita el acceso a la ayuda externa, como los psicólogos, los trabajadores sociales y monitores juveniles y los servicios culturales y comunitarios. Esto puede verse facilitado por la intervención de mediadores procedentes de la comunidad local que puedan impulsar la comunicación y reducir la desconfianza;

4)

apoyar y capacitar a los profesores en su trabajo con los alumnos en situación de riesgo es condición indispensable para poder tomar medidas acertadas a nivel escolar. La formación inicial de los profesores y el desarrollo profesional permanente de los profesores y directivos escolares los ayuda a abordar la diversidad en el aula, a apoyar a los alumnos de entornos sociales desfavorecidos y a solucionar situaciones docentes difíciles;

5)

las actividades extracurriculares después del horario escolar y fuera del centro escolar, así como las actividades artísticas, culturales y deportivas, pueden aumentar la autoestima de los alumnos en situación de riesgo y aumentar su capacidad de aguante ante las dificultades que surjan en su aprendizaje.

1)

la tutoría individual ayuda a cada alumno a superar dificultades concretas de tipo académico, social o personal. Ya sea con un enfoque individualizado (tutoría individual) o en pequeños grupos (tutoría colectiva), los alumnos reciben una atención específica, que suelen impartir el personal docente, los miembros de la comunidad o uno de sus compañeros;

2)

adaptar la enseñanza a las necesidades de cada alumno, reforzar las metodologías de un aprendizaje personalizado y facilitar el apoyo a los alumnos en situación de riesgo los ayuda a adaptarse a las exigencias de la educación formal y a superar los obstáculos creados por el sistema de educación y formación, y puede así contribuir a limitar la repetición de curso;

3)

reforzar la orientación escolar y profesional ayuda a los estudiantes a tomar decisiones sobre sus opciones de trayectoria profesional, la transición dentro del sistema educativo o entre educación y empleo. Reduce el efecto de las malas decisiones basadas en falsas expectativas o en una información insuficiente. Ayuda a los jóvenes a tomar decisiones que satisfagan sus ambiciones, intereses personales y talentos;

4)

garantizar que los jóvenes cuya situación económica pueda inducir la suspensión de sus estudios tengan acceso a las medidas adecuadas de apoyo financiero. Cuando se considere conveniente, tales ayudas podrían condicionarse o estar vinculadas a las prestaciones sociales.

1)

los programas de segunda oportunidad que tienen éxito proporcionan unos entornos de aprendizaje que responden a las necesidades específicas de quienes han abandonado prematuramente los estudios, reconocen el aprendizaje que habían adquirido anteriormente y apoyan su bienestar. Estos programas difieren de las escuelas tanto en los enfoques organizativos como en los pedagógicos y a menudo se caracterizan por el tamaño reducido de los grupos de aprendizaje, por una enseñanza personalizada, adaptada a la edad e innovadora y por la flexibilidad de sus itinerarios de aprendizaje. En la medida de lo posible, deberán ser fácilmente accesibles y gratuitos;

2)

es importante establecer distintas vías de reincorporación a la enseñanza y la formación generales. Las clases de transición pueden ayudar a tender un puente entre el fracaso escolar anterior y la reincorporación en la enseñanza general;

3)

reconocer y validar aprendizajes anteriores que incluyan las competencias logradas en el aprendizaje no formal e informal aumenta la confianza y la autoestima de los alumnos y facilita su reincorporación en la escuela. Puede motivarlos a continuar su educación y formación y los ayuda a identificar sus talentos y a tomar mejores decisiones en cuanto a su trayectoria profesional;

4)

el apoyo individual específico integra un apoyo social, económico, educativo y psicológico para los jóvenes que se hallan en dificultades. Esto es especialmente importante para aquellos que tienen graves problemas sociales o emocionales que les impiden continuar sus estudios o formación.