Bases y reglamento:
I. Introducción general:
I.1 Motivo y objeto del concurso:
La ciudad de Santiago de Compostela, junto con
otras ocho ciudades, ostenta la capitalidad europea
de la cultura en el año 2000 (Reikjavik, Bergen,
Helsinki, Cracovia, Praga, Bruselas, Bolonia y
Aviñón). Con este motivo, el Ayuntamiento y el
Consorcio de la Ciudad de Santiago de Compostela
han puesto en marcha un concurso de arquitectura
y urbanismo que involucra a profesionales de
Iberoamérica y de la Unión Europea (UE), en un
intento de potenciar y fomentar el intercambio de
conocimientos y experiencias en el área de urbanismo
y la arquitectura entre ambos continentes.
La esencia de este concurso profesional de
arquitectura y urbanismo reside en la defensa o en la
posibilidad de comparación de un modo de
crecimiento de la ciudad cuyas pautas podrían
encontrarse en los modelos europeos.
La polémica sobre la ciudad hoy en día está
situada posiblemente en los primeros lugares del interés
público. Las amenazas del deterioro del ecosistema,
la incidencia de tragedias que pueden reducir a
testimonios ruinosos la vida en las ciudades, la cultura
del consumo y, en gran medida la generación de
un mundo nuevo a través de los avances en los
medios de información y comunicación, son factores
que se acumulan en la discusión sobre el modelo
de ciudad que disfrutamos o padecemos.
I.2 Objetivos:
En la perspectiva de una mayor apertura y
cooperación entre los países del ámbito de este concurso
se pretende ahondar a través de él, en los
conocimientos de diversidades y aspectos en común. Un
objetivo prioritario del concurso es el intercambio
de ideas también entre los distintos países
iberoamericanos en torno a este tema.
La meta es ayudar a elaborar un espacio teórico
compartido entre iberoamericanos y europeos,
potenciando el desarrollo de nuevas propuestas y
dándolas a conocer en la escena internacional bajo
la cobertura que ofrece en esta coyuntura del 2000
la ciudad de Santiago de Compostela.
Los objetivos esenciales del programa, aparte del
debate en sí mismo y de los resultados de un
concurso, son entre otros:
Aportar al mundo iberoamericano, en el campo
del urbanismo, el planeamiento y la arquitectura
en la ciudad, pautas, herramientas y procedimientos
para el crecimiento y el desarrollo, compatibles con
las huellas y los patrones de la ciudad europea de
una gran parte de sus núcleos urbanos actuales.
Trasladar al contexto europeo contribuciones, que
desde el mundo iberoamericano se producen en este
debate y que en gran medida permanecen
marginadas en la constelación cultural de Europa.
Proponer alternativas válidas y viables para la
configuración de la ciudad del siglo XXI que puedan
contribuir a resolver el desajuste existente hoy en
esas ciudades entre los modelos económicos y los
requerimientos sociales con los parámetros
culturales e históricos.
Producir ejemplos concretos que en el tiempo
y en la geografía puedan abrigarse en cauces
comunes, con metas compartidas.
I.3 Tema:
Se propone el tema del "Modelo europeo de
ciudad: Historia, vigencia y proyección de
futuro/Contrastes en Iberoamérica", a la reflexión de los
profesionales de la arquitectura y del urbanismo. Se
trata de verificar la vigencia de las pautas de relación
que se dan en la ciudad europea de hoy y de ayer,
de los patrones de crecimiento -tan diversos- que
se están promoviendo en este continente -y
particularmente en casos concretos españoles- como
contraposición al urbanismo exclusivamente
expansivo en términos territoriales. Del mismo modo que
nuestro "habla" es el mismo y es distinto en cada
lugar donde éste se utiliza, también el uso y la
construcción de la ciudad podrían ser tan distintos y
tan coincidentes como sucede con el modo de
expresarse verbalmente.
Desde la reflexión sobre la compatibilidad con
las nuevas tecnologías hasta la incidencia de los
patrones socioeconómicos ajenos sobre la imagen
de las periferias urbanas, toda una cadena de
variables enriquecedoras pueden ser aportadas a este
debate a través de las propuestas formalizadas en
base a problemas concretos desde lugares distantes,
tan sólo vinculados por la herencia cultural traducida
al lenguaje de los usos, las costumbres, los gustos,
los comportamientos, en resumen: A la vida
cotidiana de los pueblos.
Los elementos fundamentales de la discusión, que
darán pie o generarán las exposiciones,
publicaciones y fases del concurso y en los que se
fundamentará el criterio común a seguir por cada uno
de los jurados que se constituyan, son:
La vigencia del modelo conceptual de la ciudad
europea y su posible continuidad como patrón en
el crecimiento urbano futuro.
Los contrastes y afinidades entre la ciudad
europea y la ciudad iberoamericana.
El espacio público: Zonas libres, viario,
equipamientos, mantenimiento.
La arquitectura en la ciudad: Lenguajes,
simbolismo, monumentalidad, identidad, economía de
medios, respuesta al medio ambiente.
La arquitectura de la vivienda. La vivienda como
generadora de tejido elemental y soporte del espacio
urbano.
Las nuevas técnicas en respuesta a las nuevas
demandas.
I.4 Ámbito y organización del concurso:
Se propone "El modelo europeo de ciudad:
Historia, vigencia y proyección de futuro/Contrastes
en Iberoamérica", a la reflexión de los profesionales
de la arquitectura y del urbanismo a través de un
concurso en dos fases que reúne, en torno a este
tema unificador, nueve áreas de trabajo concretas
en siete países. Todas ellas proponen un programa
de necesidades urbanas, sociales, culturales y
económicas en busca de soluciones y de una viabilidad
para su posterior realización. Las características
específicas de cada emplazamiento aportarán
determinados subtemas dentro del tema general de
concurso.
El concurso está dirigido a todo arquitecto o a
todo equipo dirigido por arquitectos de la
nacionalidad de cualquiera de los países de Iberoamérica
y de los pertenecientes a la Unión Europea (UE),
o que residan y trabajen en éstos. Todos los
arquitectos que participen en nombre propio o como
directores de equipos pluridisciplinares deberán
estar en posesión de un título y habilitados para
el ejercicio de la profesión de arquitecto según las
normas vigentes en alguno de los países antes
señalados.
Las bases del concurso son comunes para todos
los concursantes y para todos los emplazamientos
(áreas de trabajo), donde se organizarán los fallos
de la primera fase. Se componen jurados con
similares criterios, variando únicamente el programa de
necesidades de cada emplazamiento y las
características concretas del mismo. El concurso, en
primera fase, es abierto, anónimo y público, con las
limitaciones en lo que respecta a la nacionalidad
y al ejercicio profesional de los participantes que
se han consignado anteriormente.
En la segunda fase del concurso competirán tres
equipos por área de trabajo (emplazamiento)
seleccionados por los diferentes jurados (exceptuando
el caso de México en donde el jurado deberá
seleccionar tres equipos entre la totalidad de propuestas
presentadas a las tres áreas de trabajo).
Los concursantes, o los equipos de concursantes,
deben obligatoriamente elegir, entre los
emplazamientos (áreas de trabajo) propuestos, solamente
uno en el que inscribir su propuesta. Las áreas de
trabajo a concurso están situadas en: Santiago de
Compostela; en México, México D. F., Santiago
de Querétaro y Lagos de Moreno (Estado de
Jalisco); Santiago de Cuba, Santo Domingo (República
Dominicana), Río de Janeiro, Montevideo y Buenos
Aires.
En cada país participante un jurado formado por
un tronco mínimo común a todos los países
participantes de dos miembros (entre tres miembros
disponibles), además de un mínimo de tres
representantes locales y un máximo de siete y un
secretario (el coordinador de cada área de trabajo), con
voz y sin voto, fallará las propuestas para el/los
emplazamiento/s (áreas de trabajo) en ese país. El
jurado estará presidido en cada caso por la máxima
autoridad municipal local, o por profesional en quien
esta autoridad delegue expresamente.
El concurso tendrá su culminación en Santiago
de Compostela, a final del año 2000, donde un
jurado internacional integrado por destacados
profesionales de Iberoamérica y de la UE evaluará los
trabajos realizados por los equipos seleccionados
en el ámbito del concurso (tres por cada país con
áreas de trabajo a concurso).
Este jurado estará compuesto por un mínimo de 9
miembros y un máximo de 11 y en él tendrán voz
-pero no voto- los tres miembros disponibles fijos
de los jurados de la primera fase, que actuarán como
"relatores" a lo largo de este fallo final.
I.5 Resumen de calendario del concurso:
Primera fase:
Fecha límite de inscripción: 10 de mayo de 2000.
Fecha límite de entrega o envío de los trabajos
para concursar en la primera fase del concurso: 15
de junio de 2000.
Fallo. Selección de las propuestas por los Jurados
Nacionales: Entre el 22 de junio y el 31 de julio
de 2000.
Resultados:
Plazo máximo de envío del importe de los premios
y reconocimientos: 31 de enero de 2001.
Publicación del catálogo de resultados del
concurso y comienzo del itinerario de la exposición: 1
de abril de 2000.
I.6 Ayudas, subvenciones y premios:
Primera fase: Cada jurado, constituido en cada
uno de los países con áreas de trabajo a concurso,
y en los plazos que se señalan en el calendario,
seleccionará tres propuestas cuyos autores o equipos
autores recibirán, a través del Director del mismo,
una subvención de un mínimo de 1.500 euros (o
su equivalente en moneda extranjera) para el
desarrollo de la segunda fase. También se concederá
una ayuda de un mínimo de 500 euros (o su
equivalente en moneda extranjera) a aquellos
concursantes del ámbito de la Unión Europea, para que
uno de los representantes del equipo se traslade
a Santiago de Compostela en la etapa final del
concurso. Esta dotación para el caso de seleccionado
en países de Iberoamérica será, como mínimo,
de 1.200 euros (o su equivalente en moneda
extranjera).
Segunda fase:
El jurado que se constituya en Santiago de
Compostela en la última semana de noviembre de 2000
podrá otorgar un mínimo de tres premios
-igualespor importe de 24.000 euros (o su equivalente en
moneda extranjera) y un mínimo de cinco
reconocimientos con una dotación en metálico de 4.500
euros (o su equivalente en moneda extranjera).
Santiago de Compostela, 10 de abril de 2000.-El
Gerente del Consorcio de la Ciudad de Santiago,
Ángel Ligero de Tejada.-&20.996.
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