Orden de 9 de mayo de 1983 por la que se dispone que el ejercicio de las funciones propias y delegadas de un Subdirector general en los casos de vacante, ausencia o enfermedad será desempeñado por el funcionario que designe el Director general entre los que ostenten la categoría orgánica de Subdirector general.
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«BOE» núm. 116, de 16 de mayo de 1983, páginas 13579 a 13579 (1 pág.)